CASA CARACOL, CARTA ABIERTA A CLIENTES, AMIGOS Y AUTORIDADES DE SAN CARLOS DE BARILOCHE:
Es nuestra intención mediante esta carta, hacer pública nuestra posición y dar respuesta a lo publicado en el diario El Cordillerano bajo el título '' Inhabilitan a comercio del kilómetro 12.200'', del día 15/12/2010.
Como muchos de ustedes sabrán, fue con gran esfuerzo y sacrificio que logramos comprar en el 2.005, la propiedad denominada ''Casa Caracol''. Apostando a nuestro país y sobre todo a nuestro querido Bariloche.
Así fue que comenzamos nuestro Proyecto con la idea de brindar un restaurant con un espacio cultural alternativo en nuestra ciudad, que promoviera y apoyara a nuestros artistas y músicos locales, brindándoles un espacio para poder difundir su arte.
Lamentablemente, y luego de engorrosos trámites, donde hemos tratado de adecuarnos a las disposiciones vigentes, sobre todo a la Ordenanza 767 CM 99 Dictamen 34, nos encontramos con que nos han rechazado la habilitación definitiva.
Es nuestra intención dejar en claro, el por qué nos han inhabilitado el lugar. Dicha Ordenanza, de 11 años de antigüedad, establece que para habilitar un comercio como restaurant en el km 12.220 de Bustillo, se debe contar con 1.500 m2 de terreno y 25 m2 de frente. Es decir, que nosotros al tener un terreno de tan ''solo'' 909 m2, no podemos habilitar un restaurant aquí, ni siquiera adquiriendo un terreno lindante, puesto que aun así no llegamos tampoco a los 25m2 de frente como se establece en dicha ordenanza.
Evidentemente, en la época cuando esta Ordenanza fue sancionada, los terrenos o eran más económicos o la gente era muy pudiente, puesto que para contar actualmente con un terreno de 1.500m2 sobre Bustillo tan solo para poner un restaurant, hay que ser millonario, y si lo fuera, probablemente no estaría aquí trabajando.
Es decir que según esta Ordenanza, y sin importar todo nuestro trabajo y capital aquí invertido, nos debemos resignar a vender nuestra casa porque no podemos habilitarla como restaurant con espacio cultural, aun cuando enfrente nuestro funciona actualmente otro comercio gastronómico y a pocos metros de nuestra casa, hay un sinnúmero de restaurantes, importantes cervecerías, etc.
Según, la Ordenanza 767 CM 99 Dictamen 34, debemos dejar también a un sinnúmero de familias de la ciudad sin su fuente de trabajo, no solo quienes formaban el equipo de Casa Caracol, sino también los artistas y músicos, que encontraban en nuestra casa un espacio no solo para difundirse, sino también para trabajar y ganar un sustento digno.
Fue en vano todo nuestro esfuerzo, nuestro capital invertido, el pagar los impuestos en tiempo y forma, nuestras reiteradas reuniones con las Subsecretarías de Gestión Urbana, los diversos expedientes elevados a Obras Particulares, y tantos otros trámites que hemos iniciado sin obtener resultado alguno.
Lejos de contemplar nuestra situación, y constando un trámite de iniciación de habilitación comercial, mientras tratábamos de buscar alguna solución en Obras Particulares y Planeamiento, prometiéndonos que iban a considerar el caso, se nos contestó con multas sobre multas, sin siquiera buscar una solución.
No somos delincuentes ni tampoco queremos que nos regalen nada, solamente queremos que nos dejen hacer lo que mejor sabemos: Trabajar. Pero pareciera que no tiene importancia para quienes debieran revisar y reconsiderar la Ordenanza 767, la cual con los actuales niveles de crecimiento en la ciudad, ha quedado totalmente obsoleta.
Esta ordenanza atenta contra el desarrollo de microempredimientos, y no se promueven ni generan ámbitos, ni espacios para el desarrollo de los artistas locales, el patrimonio cultural de una ciudad es un bien publico invaluable y tiene que ser una prioridad como política de desarrollo local.
Habiendo dejado en claro, el por qué de tal inhabilitación comercial, queremos agradecer profundamente a los muchísimos amigos ganados durante estos años de trabajo, como así también a los tantos músicos y artistas de prestigio local y nacional, la escuela de danzas y los talleres de cerámica, que han pasado por nuestra casa deleitándonos con su arte.
Por ello, hoy más que nunca decimos: ''NO al cierre de Casa Caracol. SÍ a la revisión y modificación de la Ordenanza de Planeamiento 767 CM 99''
Atentamente,
Rodolfo Acuña y familia.
DNI: 24.539.866
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